
Artículo de los criminólogos e impulsores de School Safety®, Abel González, doctor y profesor de criminología en UDIMA, y Pedro C. Torrente, profesor de criminología en la URJC, sobre convivencia escolar y prevención del acoso escolar.
La misión de los centros educativos es preparar a nuestro mayor valor, los niños, para enfrentarse a los desafíos de la vida con la mayor garantía de éxito posible. Entre esos desafíos se encuentra la adecuada convivencia con el prójimo, así como la transmisión de unos valores éticos y morales sólidos, fundamentados en el respeto de los derechos humanos.
En una época en la que el espacio de convivencia se ha ampliado también al ámbito cibernético, es conveniente preguntarnos qué respuestas dan los centros educativos y sus profesionales ante los retos que plantea la menor edad y las nuevas formas de relacionarse con los iguales. Huelga decir que en los centros son múltiples actores los implicados en la convivencia y la educación: desde el profesorado hasta el educando, pasando por padres y madres, personal de servicios y otros profesionales dedicados a la educación de nuestros hijos, donde todos los actores son igual de importantes a la hora de enseñar a convivir.
Ahora bien, la pregunta clave es: ¿están estos profesionales preparados para prevenir, detectar, gestionar y controlar los problemas de convivencia que surgen?¿Gozan de suficientes recursos y apoyo para realizar estas importantes labores?
La experiencia acumulada a lo largo de los últimos 15 años nos muestra cómo las etiquetas no son buenas consejeras: algunos centros catalogados como conflictivos manejan un alto número de programas preventivos, interventivos y de sensibilización, con cierto éxito; en otros casos, centros catalogados como de alto-standing han llegado a ser condenados por la falta de programas y mecanismos de intervención ante los problemas de convivencia que surgen y no haber dado respuesta a casos graves que, siendo los menos, tienen un alto coste para todos los implicados.
En este contexto y bajo las premisas antes aludidas, School Safety® se ha pensado para ofrecer a los centros escolares y a todos los implicados en la educación y la convivencia mecanismos y soluciones para prevenir, gestionar y minimizar el impacto de los problemas de convivencia.
Algunas de las preguntas que se lanzan en la auditoría del certificado son: ¿qué mecanismos preventivos tienen los centros?, ¿qué formación específica han recibido los profesionales que allí trabajan?, ¿qué protocolos se ponen en marcha ante un problema determinado?, y por tanto, ¿es eficaz y efectiva dicha actuación?, ¿cómo se evalúan los resultados de las iniciativas en materia de prevención?, ¿cuál es la relación con otras instancias implicadas en la prevención y el tratamiento de estos problemas ante un caso determinado?
Con la respuesta a los interrogantes anteriores, encontramos que la finalidad de nuestro Certificado School Safety®, del cual nos sentimos muy orgullosos, es precisamente evaluar cuán preparados están los centros y sus profesionales para dar respuesta a los problemas que surgen, así como dar respuesta a las preguntas anteriormente planteadas, entre otras.
Este servicio pretende ser una herramienta útil, eficiente y cualificada para mejorar la convivencia en los centros escolares y la calidad de las relaciones entre las personas que en los centros educativos pasan gran parte de su tiempo. Fundamentado en una sólida base teórica, a través de la cual se atienden a factores individuales, sociales y contextuales, el Certificado School Safety® se articula sobre los mejores resultados de la investigación empírica en materia de prevención y tratamiento de problemas de acoso, ciberacoso y convivenciales.
Como último apunte y en términos generales, los programas que mejor funcionan son aquellos que son altamente directivos, en los que participa de forma activa toda la comunidad educativa, diseñados de forma democrática con los receptores de dichos programas (nuestros hijos) y que cuentan con protocolos integrales pero, a la vez, específicos sobre el problema que se pretende prevenir/atajar. Además, deben contar con una sólida base teórica, junto con el apoyo total del equipo directivo y los padres y madres a la hora de ponerlo en marcha, respetando y haciendo respetar sus postulados y las consecuencias del incumplimiento. Y, entre otras cuestiones, deben escapar del generalismo, el cual es altamente ineficiente para abordar problemas complejos.
Nuestra experiencia en materia de intervención y prevención nos muestra que existe un conocimiento suficiente y adecuado para prevenir y resolver problemas de convivencia; además, existen medios para hacerlo. Es por ello que el Certificado School Safety® se encamina a proporcionar a los centros y a sus profesionales los mecanismos adecuados para prevenir más y mejor, así como para mejorar la intervención ante los problemas que, antes o después, surgen durante la intensa convivencia en el horario escolar.
Si quieres conocer más sobre School Safety® pulsa aquí.